hace mucho calor, aunque también humedad porque han caído incluso algunas gotas en algún momento de la mañana, que se ha caracterizado por una reunión donde ha sido difícil mantener el orden, más por el ímpetu y las ganas de los participantes que por una intención de dominar por parte de los egos. el objeto se siente bien en su nuevo trabajo. al principio parece que es tranquilo, aunque desconfía un poco de esto. es previsible que la cosa se anime mucho más adelante. por la tarde el objeto volvió a estar encerrado, en silencio casi absoluto, trabajando y adorando a mi Señor.
justo por la tarde el objeto estaba viendo una conferencia grabada y el ponente ha dicho que tenía un blog, que estaba abandonado "como casi todos los blogs". por supuesto eso le llamó la atención al objeto porque poco antes había comprobado que la primera entrada de este blog era del 1 de enero de 2005. es decir, que el próximo 1 de enero cumplirá 20 años online. y está muy lejos de estar abandonado. es cierto que sufre retrasos, a veces importantes; que las diferentes mudanzas han dejado algunos huecos o han producido algunos contratiempos, como enlaces que no funcionan y cosas parecidas. pero si te paras a pensar son casi veinte años, y eso no lo puede decir todo el mundo. seguro que no es el mejor blog del mundo, pero si intentamos imaginar nuestros últimos veinte años, a aquellos que lo puedan recordar porque puede que haya lectores que aún no hayan llegado, recordaremos las cosas que hemos dejado, los proyectos que han fracasado y lo mucho que hemos cambiado en este tiempo. este diario de un objeto, que antes fue el diario de un esclavo también ha sufrido las mismas vicisitudes y ha sobrevivido hasta hoy, cree el objeto que con buena salud.
la primera tentación es sentir orgullo, pero esa es una obra del ego. lo que siente el objeto es tranquilidad y paz, pero sobre todo que el blog ha sido casi desde el principio un reconocimiento y monumento a la entrenamiento al que mi Señor ha sometido a su objeto. todo es obra. Suyo es todo el mérito.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.