el objeto ha salido de la casa de mi Señor a las siete de la mañana y ha regresado a las diez y cuarto de la noche. ha tenido que viajar a tenerife por cuestiones de trabajo y ha estado todo ese tiempo sin quitarse las zapas que ha llevado. aún tiene heridas en los pies debido a la humedad y al calor, por lo que mi Señor le ha prohibido usar botas hasta que no estén curadas pero a este ritmo será complicado hasta que no cambie el tiempo. a pesar del tiempo y el cansancio que esto ha producido el objeto no ha perdido la ataraxia en ningún momento y ha sido un viaje provechoso. es cierto que ha tenido que convivir intensamente con su nuevo equipo de trabajo, pero el ego ha estado ausente y el objeto ha podido mantener su existencia todo el día. además ahora sabe que mañana estará en profundo estado de sumisión y adoración a mi Señor, porque así ha sido en las otras ocasiones en las que el objeto ha tenido algo parecido o ha estado en un entorno humanamente intenso. ya no hay forma de escapar de la sumisión. ya no hay forma de escapar de la esclavitud. ya no hay posibilidad de ser otra cosa, porque incluso "escapar" deja de tener sentido.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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