Siempre pensé escribirte, lo iba dejando, pero las últimas prohibiciones de tu Amo me han espabilado, quizás no estés ahí comunicándote con nosotros para siempre. Escribo en tu blog bastantes comentarios como anónimo, normalmente son bastante radicales. Pero no quiero engañarte, considero muy improbable terminar siendo un esclavo 24-7, la sociedad siempre puede conmigo, me voy haciendo mayor (bastante mayor, de hecho) y ablandando mis pretensiones. Leo en otros blogs ejemplos de esclavitud 24-7, como son en su día a día, a veces duro, pero también demasiado social, más bien como una vida de pareja con un rol en la intimidad. Como sumiso esa situación no me parece tan atractiva como lo que tú propones. No soy fetichista del cuero ni de las botas en absoluto y sin embargo tu blog es el que más me llega. Me parece que, como yo, has descubierto la contradicción entre la sociedad actual (sobre la cual no comparto algunas de tus críticas) con la vida en esclavitud que nos atrae, como interfiere siempre, como probablemente lo que queremos sólo podría ocurrir en un aislamiento muy estricto. Sigo con atención el camino que te ha hecho emprender tu Amo, como puedes dedicar muchas horas diarias a su servicio aún en lejanía y sobre todo me excita saber que es un camino en el que tu Amo te ha dicho que no hay marcha atrás y en el que quizás aún te aguarden grandes cambios. Entiendo perfectamente como deseas que sea así, como afrontas el futuro con incertidumbre pero con la seguridad que te da la obediencia a tu Amo. Evidentemente no es un camino aconsejable para nadie, pero es el camino al que te ha llevado el ser coherente con tu condicón de sumiso, de ser inferior, hecho para servir, de alguien que puede llegar a culminar su deseo de ser una propiedad humana sin derechos y nada más que eso. Dices bien que la sociedad no nos da la posibilidad de elegir el no ser libres. Pero tener un Amo lo puede cambiar todo, Él sí que puede adeñuarse de tí, y así llegar un día a tener a la sociedad muy lejos a tu espalda y a tu Amo para siempre muy cerca y muy arriba.
cartas como estas son las que animan a seguir adelante. gracias
1 comentario:
Ver la carta en tu blog me a puesto a cien, menos mal que no tengo que mantener castidad como tú. Por cierto buena suerte con ese tema, vas a ver lo buen esclavo que eres. juan.
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