día 4326 de esclavitud, castrado permanentemente

no ha sido un día bueno, casi en ningún sentido, salvo tal vez en que se ha producido de nuevo una confirmación de ese extraño vínculo que mantiene unido al Dueño y al objeto. por la mañana el objeto se despertó normal. es cierto que en el trabajo tuvo varias decepciones, pero nada extraño. sin embargo casi al final de la mañana empezó a sentirse muy mal, triste y bastante deprimido. cuando llegó a casa lo puso bajo las botas del Dueño y Éste le dijo que era culpa suya, porque había tenido una mañana infernal. el objeto no pudo sino sorprenderse de esto. el objeto está viviendo algunas cosas complicadas que le obligan a ser más humano de lo normal, pero nada del otro mundo. la razón de que hoy se sintiera así es que el Dueño estaba pasando un mal día. suena a algo místico pero es algo que hemos comprobado en muchas situaciones y en muchos momentos: desvelarnos a la misma hora, incluso con la hora de diferencia de canarias; de pronto empezar a sentirse triste sin razón y es porque al Dueño le ha ocurrido algo, o al contrario, sentir alegría sin motivo. el objeto siempre suele ser muy escéptico con estas cosas pero cada vez lo tiene más claro. las pruebas se acumulan y contra ellas se está quedando sin argumentos.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.