si ayer hablábamos de una escena de bondage perfecta, pero irreal. la imagen de hoy nos trae una imagen real, aunque no tan elaborada. en cierta medida tiene más calidad, en referencia a la camisa de cuero y a la capucha del mismo material. son objetos caros, costosos, y que muestran el compromiso del dueño con el bdsm. la cuerda de las ataduras es más burda y el escenario menos preparado, de hecho se ve el armario, no sabemos si el del atado o del atador, al fondo. a pesar de estar menos elaborado y de aparentar menos calidad, el perro prefiere la foto de hoy a la de ayer. en el bdsm la autenticidad es un grado. hay demasiada gente falsa, que vive de apariencias y que quiere presentarse como no es. hay muchos Amos que piensan que por llevar botas o cueros todos deben arrodillarse ante ellos, o esclavos que prometen todo pero luego los Amos deben comportarse según sus fantasías y criterios. aquí hay algo, en esta foto, que muestra autenticidad, originalidad, algo propio. las fotos y videos que saca el Dueño cuando el perro le sirve son un poco de este estilo, no tan elaboradas como las fotos de estudio pero muy, muy auténticas.
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