martes, 3 de julio de 2012

cartas desde la mazmorra 48


a partir del libro del que ya ha hablado este perro en este blog, "owning and trainning a male slave", ha surgido en su mente sumisa una reflexión sobre el concepto en que se basa dicho libro: la esclavitud no consensuada. a muchos amantes del bdsm este concepto les parece extraño, sobre todo a partir de aquel lema de "libre, seguro y consensuado". aún admitiendo estas tres palabras como válidas, a muchos esclavos, y Amos, esto nos parecía raro. entonces surge este concepto de no consensuado. en una esclavitud consensuada el esclavo siempre conserva las riendas, mantiene el control y, por tanto, condiciona el desarrollo de la relación. el Amo siempre está en situación de hacer o decir algo que no le guste al esclavo y este pueda desaparecer, romper la relación, marcharse. para algunos esclavos esto no es suficiente, porque la necesidad de someterse va más allá de este mantenimiento del control. aquí aparece este libro y defiende que es posible una relación no consensuada entre Amo y esclavo. evidentemente la esclavitud, al menos formalmente y de palabra, no existe en nuestra sociedad pero sigue subyaciendo a ella, y a esto se agarra la autora para defender la posibilidad de una esclavitud más auténtica.
el principio es simple, en nuestra sociedad nadie te obliga a firmar un contraro, pero si lo hacer, es vinculante y estás obligado a cumplirlo a riesgo de sufrir las consecuencias. nadie te obliga a tener una hipoteca, pero si quieres tener una casa, estás obligado a contratarla y a pagar, a riesgo de perder todo lo que tienes si no cumples los pagos. un artista, que quiera triunfar, debe firmar un contrato del que, posiblemente, se arrepienta en el futuro, cuando tenga éxito y las claúsulas del contrato condicionen su libertad creativa. muchos millones de personas estamos sujetos a las condiciones que hemos firmado en nuestro contrato laboral. no tenemos libertad para elegir el horario laboral o las actividades que debemos hacer. nos las mandan y punto.
en esto se basa la esclavitud no consensuada. firmas un contrato de esclavitud libremente, por el cual renuncias a tu libertad y te comprometes a obedecer. a partir de ahí comienza un proceso de entrenamiento del esclavo que le llevará cada vez a un grado de sumisión más profunda. si decides romper el contrato tienes que asumir ls consecuencias. 
la autora del libro dice que entre las amas de su grupo, todas tienen esclavos no consensuados y que sólo uno quiso recuperar la libertad. el precio a pagar fue tener que abandonar la ciudad donde vivían de la vegüenza que sufrió cuando todos supieron que habái sido esclavo y las cosas que había hecho. parece radica, pero este perro siempre ha dicho que no es un juego. por eso hay que tener mucho cuidado cuando uno se convierta en esclavo de alguien. puede que sea la última decisión libre que tomes. seguro que este perro seguirá hablando de esto.
feliz semana

1 comentario:

Anónimo dijo...

no tengo porqué un Amo va a seguir poseyendo un esclavo que definitivamente quiere dejar de serlo. no digo que sea imposible, pero sí muy complicado. pero quizás esos métodos si que son útiles para retener a un esclavo que pase por una fase de rebeldía temporal. como en todo lo demás, es el Amo quien decide. juan.