nunca se tiene del todo a un esclavo, o al menos nunca se le tiene suficientemente sujeto. aquí toma plenamente su sentido la frase, cuanto más mejor. los esclavos, igual que los perros o cualquier otro animal amaestrado y adiestrado, debe ser constantemente reforzado en su entrenamiento para que interiorice las normas, las rutinas, hasta convertirlas en sentimientos, emociones y principios sin los cuales no pueda vivir, lo que hace su virtual huída algo impensable. lo que más agradece un esclavo es precisamente eso, las rutinas y las normas, cada vez más estrictas, cada vez más restrictivas, que le hagan ir cada vez más abajo en su ser y convertirse en alguien sin ego, en un ser nacido y que vive sólo para obedecer. cuanto más sujeto, más él mismo, cuando más controlado, más feliz, cuanto más dominado, más sumiso.
1 comentario:
lindo
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