la mejor forma de mantener un esclavo en el suelo es poniendo una bota encima suya; y no una bota cualquiera, sino la bota de su Amo. lamerla es un honor, besarla es un privilegio. estar po debajo de la bota de tu Amo es estar por debajo de El de forma absoluta porque la bota es lo último que hay antes del suelo, de la tierra. situarse física o simbólicamente ahí es tomar conciencia de tu vida empieza justo en lo más bajo de la vida de tu Dueño. justamente los esclavos somos felices así, siendo lo último de nuestros Amos. sabemos que ocupamos un lugar importante en su vida, pero ese lugar es el que Ellos quieran darnos, no el que nosotros elegimos o exigimos. nuestro espacio es bajo sus botas, todo lo que esté por encima de eso es un regalo que Ellos nos dan.
2 comentarios:
Pero el mayor regalo de todos los que nunca nos harán es habernos obligado a estar en nuestro sitio, humillados bajo sus botas y a su merced.
Yo también soy un puto perro esclavo de mierda, bajo sus botas o zapas o zapatos o cualquiera que sea el tipo de calzado que lleve mi Amo, humillado, soy feliz asi, deseo siempre estar debajo de sus botas, humillado y sometido. Lo deseo siempre, lo necesito para vivir. Un lamezapatos de Madrid
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