algunas imágenes bdsm parecen salidas de una película de ciencia ficción, como esta. no hay ni un solo pedazo de piel, nada que pueda hacer al esclavo reconocible. la identidad es nula, no es nada. al menos puede ver, aunque es una visión limitada por esos agujeros en la capucha. está condenado al silencio, enclaustrado, es como llevar una mazmorra contigo mismo. allí donde vayas, allí donde estés no eres nadie: tu familia no te reconocería, la policía no podría identificarte, tus amigos pasarían a tu lado preguntándose qué loco se pondría en esa situación.... de pronto estás alejado del mundo, de todo y de todos, has perdido lo que eres, lo que tienes. para muchos es una experiencia casi traumática verse con capucha, o verse amordazado, y sólo lo soportan por la esperanza de que terminará en algún momento, pero ¿y si no fuera así? ¿y si vivir así fuera precisamente eso, la vida?
1 comentario:
Supongo que esa imagen te resulta doblemente atrayente. Por tu fetichismo hacia ese tipo de prendas, que no comparto, y por lo que explicas tan bien: la idea de enclaustramiento y de convertite en algo a disposicón del Amo y aislado de la sociedad. Esa locura que sólo unos pocos imaginamos y en la que quizás alguno de nosotros vive ahora mismo al fin la vida que siempre supo que le correspondía. Para bien o para mal, pero sin dudas ni marcha atrás.
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