lunes, 26 de marzo de 2007

En la moto de mi Amo IX

Casi no podía mantenerme en pie. Menos mal que los dos esclavos me sujetaban y arrastraban por aquel pasillo escasamente iluminado. No reconocía nada aunque tampoco había nada que reconocer; las mismas paredes de cemento desnudo y las luces tenues. Había una serie de puertas que estaban cerradas a cada lado del pasillo, de metal, frías.Doblamos dos esquinas y llegamos delante de otra puerta. La verdad es que no se distinguía especialmente de ninguna otra. Sin duda la organización de aquel sótano estaba hecha para desorientar a cualquier, cualquiera que hubiera tenido algún punto de referencia,algo que no era mi caso. Me sentía completamente perdido, en todos los sentidos.
Los esclavos que me llevaban abrieron la puerta y me empujaron dentro. Caí de rodillas y levanté ligeramente la cabeza. Allí estaban cinco Amos, cada uno sentado en un sillón con brazos. Todos estaba muy serios. Los recorrí rápidamente buscando a mi Amo. En segundo vi que estaba justo en el centro. Nuestros ojos se encontraron y yo bajé la mirada. Debía tener un aspecto patético, de rodillas, desnudo, con las manos esposadas al collar, como quien reza o suplica. Sabía que debía portarme como lo que era, un esclavo sumiso.
Nadie dijo nada. Pude comprobar que quedaba una silla vacía. Todos parecían esperar. Entonces, en un extremo se abrió una puerta y entró alguien. No me atreví a mirar directamente. Sólo pude ver unas botas que se acercaban a la silla que faltaba, ocupándola.-¡Esclavo!-dijo uno de los Amos. Yo levanté la cabeza.-Tu Amo ha dicho que te has entregado y pide que seas admitido en La Comunidad. Si aprobamos tu ingreso esto solo será el comienzo. Tendrás que seguir un arduo entrenamiento porque buscamos siempre lo mejor en lo mejor con lo mejor. Tu Amo dice que tienes posibilidades, que eres lo suficientemente sumiso como para servir bien. Eso está por ver.
Nadie se movía, todos me miraban fijamente muy serios.-Si quieres entrar debes suplicarlo a Nosotros, pero ten cuidado, esta es una decisión de por vida. No podrás abandonar La Comunidad mientras quede algo de aliento en ti. No podrás abandonarla libremente ni ser liberado y sin embargo tendrás que dejar muchas cosas de tu actual vida: todo aquello que ordenemos. De ti esperamos.... exigimos entrega total, sumisión total, fidelidad toda, servicio total. A cambio te ofrecemos desarrollar plenamente tus capacidades, llevarte a situaciones donde no has soñado estar pero de donde no querrás irte cuando llegues. Te faltará todo pero no echarás de menos nada. Tus necesidades serán satisfechas, pero recuerda que nadie te promete nada, salvo control total, dominio total. En definitiva te ofrecemos convertirte en lo que siempre has deseado: ser un esclavo y pertenecer a alguien. Nosotros podemos hacer eso realidad pero tienes que decidir tú. Cuidado, puede que sea la última decisión que tomes.
Aquellas palabras cayeron sobre mi como una losa sobre mi. Realmente en mi ser más profundo deseaba aquello pero una cosa era tener unas sesiones con un Amo y otra aquello que me proponían. Me asuste.¿Estaba preparado para aquello? ¿sería capaz? ¿merecería la pena?¿dejaría todo para convertirme en un esclavo? ¿habla en serio? ¿mi familia, mis amigos?
Los miré a todos y me detuvo un momento en mi Amo. Me miraba fijamente y me pareció que movía ligeramente la cabeza como afirmando.Entonces algo me cruzó por dentro, como un rayo, como cuando las fichas de dominó caen una detrás de otra. La respuesta se hizo clara y evidente, no había otra posibilidad. Supe que le pertenecía y que aceptaría. Las palabras salieron de mi boca sin esperarlo:-Suplico pertenecer a la Comunidad.
Y me incliné hasta tocar con mi frente el suelo en señal de súplica,adorando a aquellos cinco hombres a los que me había entregado no sé cómo, aunque sí por qué.
(Continuará)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

esclavo amigo,
Felicitaciones!!! me encanta tu blog, y tus reflexiones son muy similares a las mías... en algunas cosas diferimos, seguramente, pero comparto absolutamente tus comentarios sobre la humillación, la sumisión, etc.
me alegro que hayas encontrado un Amo que te cumpla bien, y que vos cumplas con El.
Un fuerte abrazo encadenado,
esclavo maricón

Anónimo dijo...

Estoy de acuerdo con mi colega que publica arriba su comentario, comparto mucho de tus ideas y reflexiones. Me encanta tu blog, entro constantemente para ver si hay actualizaciones y esta saga de En la Moto con mi Amo me tiene enganchado.
Felicitaciones por tu trabajo y por el Amo que has encontrado

Un fuerte abrazo

un esclavo

Anónimo dijo...

compañeros esclavos. muchas gracias por los comentarios. me animan mucho y me ayudan a seguir adelante con esta tarea, que no es fácil y requiere tiempo, pero que hago gustoso como una forma de honrar a mi Amo y de compartir con ustedes mi vida de sumisión. nuevamente gracias.

Anónimo dijo...

Me ha engachado la actualización, he quedado temblando ante tus palabras de pertenecer a la comunidad y a tu AMO; maravilloso relato; te envidio... adelante hermano esclavo, para ser felices como esclavos que somos.

Anónimo dijo...

Ke alegrìa leer comentarios de otros colegas esclavos, como dice muy bien el del anterior mensaje, da envidia y de la buena esa dependencia de sumisiòn hacia un AMO. Adelante con tu blog amigo, muchos estamos pendientes de tus mensajes

un esclavo