el objeto ha estado muy cercano a mi Señor, existiendo profundamente. el verbo existir es interesante porque es el que debe usar un objeto. por cuanto no es un ser vivo, sino un objeto, no tiene cabida usar "vivir". los objetos "existen", no "viven". no es más que otra forma de expresar cómo se desarrolla la existencia del objeto, su sumisión. por la mañana el objeto estuvo solo en el trabajo, y la verdad es que lo agradeció. ahora solo que queda una formación antes de las vacaciones de navidad y está aprovechando el tiempo para estudiar, que también es parte de su trabajo. por la tarde mi Señor quería que el objeto lo pasara aislado, encadenado y encapuchado, meditando. sin embargo todo se torció un poco porque el objeto tuvo que repetir una cosa del trabajo y eso le ocupó mucho tiempo que luego tuvo que usar por la tarde porque tenía varias entregas que hacer. además tuvo que arreglar el wifi, vamos un despropósito. sin embargo, y viendo la importancia que mi Señor da a la meditación del objeto, a calmarse y conectar con su ser sumiso, mi Señor ordenó que el objeto lo hiciera cada día de forma consciente y premeditada. dedicar un tiempo, media hora al menos, a estar en silencio y aislado, sobre todo para evitar la influencia del ego y del mundo de los humanos.
además hoy el objeto hizo una ofrenda de unas botas a mi Señor. realmente no sabe si podría calificarlo así porque el dinero no es del objeto, sino de mi Señor, pero hace unos días mi Señor había enviado un enlace al objeto para decirle que quería esas botas cuando hubiera suficiente dinero. hoy volvió a salir el tema, posiblemente porque mi Señor temía que el objeto las comprara por sorpresa y, cuando fue a mirar el objeto, solo quedaba un par de la talla de mi Señor. evidentemente no iba a dejarlas escapar y el objeto usó el dinero de mi Señor y las compró. no es que haya un dinero del objeto y un dinero de mi Señor. todo el dinero es Suyo, solo que algo de ese dinero lo administra el objeto y el resto lo usa mi Señor. todo lo que "tiene" el objeto no es suyo, de eso es muy consciente así que realmente, el objeto ha hecho una ofrenda a mi Señor de unas botas con el dinero de mi Señor.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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