cuando el objeto dice que el bdsm lo que hace es invertir los valores de la sociedad en la que vivimos lo cree firmemente. ¿quién en su sano juicio podría ver esta imagen y creer que es la imagen de la felicidad? pues para el inferior que está en esa cama completamente inmovilizado, en privación sensorial y presuponemos que viviendo en esa mazmorra, lo es. en cierta medida, y como los extremos se tocan, es como ser un monje posmoderno. ¿quién puede creer que un cartujo o un trapense es feliz? y sin embargo lo son, porque hay gente que vive esa realidad y afirman que lo son y nadie puede cuestionarles que así sea. de igual forma no se puede cuestionar al esclavo que vemos aquí que ese sea su ideal de felicidad. aislado, encerrado, sin contacto con el exterior. tal vez sea un encierro temporal. tal vez lo sea definitivo, eso no importa tanto cuanto que lo es, un encierro. hay alguien que se ha tomado la molestia de transformar una habitación en una mazmorra, con puertas con barrotes y otra más con mirilla para vigilar. ha comprado una jaula como cama y un sistema de sujeciones médicas. son demasiadas molestias para una sesión temporal. esto es lo que tiene en mente el objeto cuando escribe sus cartas desde la mazmorra, se ve enviándolas desde un sitio como este.
No hay comentarios:
Publicar un comentario