día 4742 de esclavitud, castrado permanentemente

el objeto es plenamente consciente de que no lleva al día todas las secciones que se había propuesto, pero es que no es fácil llevar adelante todo eso. como siempre tal vez el objeto quiso plantearse más de lo que puede hacer, especialmente con lo referente a la novela y a escribir un manual sobre el bdsm. eso no significa que lo haya abandonado sino que irá más lento de lo que esperaba. es complicado escribir, decir algo novedoso y al mismo tiempo seguir con el resto de la vida: el trabajo, servir al Dueño, las formaciones en las que está el objeto metido, y la vida en general. tal vez por eso el objeto está reflexionando y pensando muchos sobre eso de ser "creador de contenidos", un título que se apropia mucha gente últimamente y que realmente está perdiendo sentido. hacerse unas fotos que has pagado pareciendo un modelo no te convierte en uno, y mucho menos se puede comparar a, por ejemplo, escribir algo o tener una idea sobre el mundo. sin embargo parece que en esta sociedad se valora eso, como ha dicho muchas veces el objeto, la estética sobre la ética, la forma por encima del contenido. a veces el objeto se pregunta si esos lederones que acumulan seguidores en internet porque son atractivos, van mucho al gimnasio y tienen un cuero increíble podrán realmente dominar y controlar a un esclavo. o si tienen tanta autoridad al natural como la que intentan transmitir en esas imágenes. es cierto que aunque el hábito no hace al monje, ayuda, a menos que lo que haga es ocultarlo. es posible que, en un mundo tan estético como este, el contenido, la profundidad pase a un segundo plano. pero lo que realmente importa de todo esto es la profundidad precisamente, el control, el intercambio de poder, el ser capaz de obedecer y de mandar. si no está eso ¿en qué se queda todo? en un mero disfraz donde gana el que mejor luce, pero no el que mejor es. por eso no debemos olvidar que tal vez un traje menos elaborado encierre un diamante más brillante y que el esclavo más tímido sea el más comprometido. no es mejor Amo el que tiene el cuero más brillante, sino el que es capaz de ordenar aquello que es necesario aunque sea difícil y no mejor esclavo el que lleva el collar más ancho sino el que es capaz de entregarlo y ponerlo todo a los pies de su Amo.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.