a veces la perversión no tiene límites, o al menos parece no tenerlos, y una forma de cruzar esos límites es unir fetiches y cosas que aparentemente no tienen que ver o incluso son excluyentes. porque ¿en qué se relacionan la castidad y con la electricidad? en teoría una intenta controlar un estímulo y la otra provocarlo. precisamente ahí esta lo perverso, en potenciar la tortura combinando de manera genial ambos aspectos. pena da al objeto el inferior al que sometan a tal tortura, porque lo que vemos en la foto del día de hoy puede ser cualquier cosa menos placentero. de hecho es una de las asignaturas pendientes del objeto porque el Dueño siempre ha querido experimentar con la electricidad pero aún no ha encontrado el artefacto adecuado, o sencillamente no se ha puesto a ello, pero todo llegará.
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