la mordaza con un pañuelo es la forma más simple de amordazar, pero curiosamente es la que más agrada al Dueño, la que más le gusta. supone el objeto que tiene que ver con sus orígenes, con cómo comienza el viaje del fetichismo para cada uno de nosotros. el hecho es que, teniendo mordazas más efectivas, elaboradas y complicadas, al Dueño sigue gustándole un simple pañuelo. la cuestión es que, con el objeto, ya ni siquiera lo necesita porque basta una palabra suya para que no pueda articular ni un sonido. su poder ha llegado hasta eso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario