el objeto ha suplicado al Dueño que limpie su mente, que la lave, que la borre y la reprograme según sus deseos y caprichos, según lo que El quiera. todo surgió en medio de una conversación intensa. el objeto pensaba que el Dueño tenía pudor de entrar en la mente del objeto, pero lo que preocupaba al Dueño es que el objeto tenía que seguir viviendo alejado de El. sin embargo el objeto le dijo que ya lo hacía, que simulaba constantemente ser humano cuando no lo era. ese argumento fue suficiente y el Dueño dijo que lo haría, aunque estaba a un paso de hacerlo ya. lo siguiente que dijo el Dueño llamó la atención al objeto. dijo "Esta bien. Lo haré. No hay otra salida. Por tu bien". nadie se ha preocupado por el objeto como el Dueño y el objeto sabe que todo lo que El hace es por el bien del objeto. por eso es necesario que desaparezca cualquier atisbo de autonomía, de separación, de independencia. la mente del objeto debe ser un instrumento de la del Dueño, una prolongación de la suya, dependiente, sumisa, obediente, sin resquicios y sin pensamientos propios o autónomos.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
jueves, 18 de abril de 2019
día 3381 de esclavitud, 1353 de castidad
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