mañana el objeto estará en presencia del Dueño, bajo sus botas, y ya hoy ha metido la pata. Dueño y objeto estaban hablando sobre los detalles del viaje en un tono muy relajado y agradable cuando, refiriéndose al viaje en avión, el objeto dice "tengo que ir con zapas", refiriéndose al hecho de que en los controles de seguridad del aeropuerto, obligan a quitarse las botas y hacerlas pasar por el control de seguridad. en otras ocasiones el Dueño había permitido al objeto hacer el viaje efectivamente en zapas. en esta ocasión la frase despertó la ira del Dueño y su enfado justificado. el motivo no era otro que había sido una afirmación. el objeto no había suplicado hacerlo, ni había preguntado cómo ir, o esperar órdenes. lo había dado por hecho. lo había decidido. y eso fue lo que molestó al Dueño. el objeto lo comprendió inmediatamente y cayó en su error, suplicando su perdón. para intentar compensar algo las cosas, el objeto suplicó hacer el viaje con las botas últimas, las que el Dueño había comprado al objeto en madrid, y se lo concedió. ahora tiene que ir en zapas hasta pasar el control de seguridad llevando las botas en una bolsa. una vez pasado irá al baño y se las pondrá metiendo las zapas en la mochila.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
jueves, 14 de junio de 2018
día 3073 de esclavitud, 1045 de castidad
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