día 2304 de esclavitud, 276 de castidad (III)

20:45 después de comer 402 se quedó encerrado en su "mazmorra". el Dueño cerró la puerta con llave y fue a echarse una siesta y lo dejó ahí para que escribiera todo lo que había pasado durante la mañana y el mediodía.
402 está muy cómodo aquí. es un espacio reducido, muy reducido, lleno de cosas pero donde hay un estante para poner las cosas de 402, una silla y una mesa. el Dueño ya le ha dicho que podría vivir en un espacio como ese sin tantas cosas y con un catre y un retrete en un extremo, así no tendría que salir para nada, salvo para ser usado. ahí estuvo escribiendo un rato.
cuando terminó de escribir, este objeto se puso a leer el último libro de tagame que compró ayer en berkana. como siempre estaba impresionante. 402 lo pasó muy bien leyéndolo.
cuando terminó volvió a tener deseos de vivir una experiencia de aislamiento sensorial. por la mañana habían sido cuatro horas y no esperaba estar tanto pero aún así se puso el antifaz y los cascos en los oidos. no oía nada, ni veía nada. con esto perdió la noción del tiempo enseguida. no supo cuánto tiempo pasó antes de que el Dueño entrara y le pusiera los mitts. una vez puesto 402 quedó inutilizado para hacer cualquier cosa.
así estuvo un tiempo indefinido, hasta que el Dueño volvió a entrar y, sin quitarle el antifaz lo llevó a la cama y lo tumbó allí donde volvió a jugar con él. en esta ocasión el Dueño volvió a "follar" la mente de su objeto hasta el punto de dejarlo en un subspace muy profundo. cuando el Dueño se levantó 402 se quedó dormido y al despertar el Dueño le dijo que se había vuelto a correr viendo a 402 allí así. es la séptima vez en 48 horas, y 402 se ha sacado la lecha con la jaula puesta, sin orgasmo. así son las coas y así tienen que ser, y 402 se alegra y agradece que así sean.
ya queda menos para que 402 vuelva a canarias, a su no-vida y los altibajos cotidianos. han sido tres días muy intensos donde ha vivido muchas cosas. ha descubierto nuevos espacios y cosas que vivir y nuevos fetiches. por primera vez ha sentido su nueva piel y ha servido al Dueño con ella puesta.
sumisión en silencio, castidad y obediencia.