día 2197 de esclavitud, 169 de castidad

el perro se ha levantado sumiso, muy sumiso, con la sumisión saliendo por cada poro de su piel. eso es señal de que ya se encuentra más o menos bien anímicamente. de hecho hoy ni siquiera se sentía perro, sino algo inferior, un objeto propiedad del Dueño. de hecho en un momento dado del día le envió al Dueño un mensaje que decía "esta cosa se acuerda del Dueño y le tiene presente".
el Dueño tiene un perro de cuatro patas, y este perro de dos incluso se sentía inferior a él, casi como sus botas, incluso menos que sus botas que son valiosas y que llevan y protegen los pies del Dueño. se podría decir que el perro tenía un ataque serio de humillación. hoy hubiera soportado cualquier trato que el Dueño hubiera querido darle, aunque fuera considerado degradante y humillante por el resto de los mortales. de hecho, cuanto más degradante y humillante, mejor hubiera sido.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega