uno no sabe lo que se esconde detrás de quien está a nuestro lado. en el trabajo, en el transporte, en el supermercado... vemos a gente aparentemente como tú, "normales". sin embargo debajo de su ropa, aparentemente "normal", se puede esconder el símbolo de que eres una propiedad y de que te controlan hasta el punto de no poder usar tu propia sexualidad. por eso no debemos juzgar a nadie, ni adelantarnos en lo que pensamos. puede ser que estemos equivocados, de hecho posiblemente los estemos.
eso lo vive el perro cada día. para la mayoría de las personas, si no todas salvo el Dueño, el perro es un cuidadano plenamente funcional que realiza sus trabajo con estándares más o menos elevados y que, aparentemente, está en una posición de control y cierto "poder". y nada más lejos de la realidad. bajo sus pantalones el perro lleva la jaula, así como la ropa que el Dueño decide que lleve. no puede usar otro calzado sino las botas y siempre, siempre, siempre, está controlado por el Dueño. lo que la gente ve del perro no es lo que el perro es realmente. por eso siempre las aapariencias engañan y no hay que dejarse llevar por ellas.
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