jueves, 26 de noviembre de 2015

día 2142 de esclavitud, 114 de castidad

hoy el blog habló con el Dueño por teléfono y pudo el perro comprobar de nuevo el poder de su voz. desde la sesión de hipnosis el perro siente algo extraño cada vez que el Dueño le habla, cada vez que oye su voz. si hubiera que usar dos palabras para definir esa sensación sería indefensión y sumisión.
el perro se siente completamente desarmado porque entra inmediatamente en subspace. fueron sólo unos minutos pero bastaron para que el perro sintiera como se hundía cualquier tipo de barrera o resistencia que pudiera tener.
en cierta medida, y en frío, el perro "teme" y desea que llegué una sesión en persona mucho más intensa y fuerte. ¿hasta dónde sería capaz de llegar el Dueño? ¿qué podría hacer con el perro? ¿qué podría hacer con el perro? ¿Qué ideas o comportamientos podría quitar o poner? ¿dónde está el límite? ¿hay límite?
el perro desea que ocurra, desea que el Dueño penetre hasta lo más profundo de su psique y esclavice sus pensamientos, que lo reprograme según los deseos del Dueño. es la esclavitud última. una vez sometida la mente es imposible poder sublevarse contra el Dueño, o no obedecerle.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.

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