el perro sigue, en el trabajo, en una situación de campo de minas. los egos están cada vez más a flor de piel, el orgullo empieza a guiar los comportamientos y las trampas y los intentos de caída están a la orden del día. la última estrategia es intentar desprestigiar por detrás todo lo que se ha hecho este año para que parezca que los que van a entrar están salvando al mundo. lo que ocurre es que el perro, incluso desde una perspectiva únicamente de la no-vida, cree que la gente no es tan tonta como algunos intentan que parezca y los compañeros se están dando cuenta del tema de forma que lo que están haciendo es quedando en ridículo.
es lo que ocurre también en la vida bdsm cuando intentamos aparentar lo que no somos, o no estamos en contacto con nuestra naturaleza. lo que ocurre es que nos ponemos en evidencia. creemos que estamos engañando a los demás y sólo nos estamos engañando a nosotros mismos. el perro está por encima de eso y, sobre todo, por orden del Dueño, no se deja pisar. curiosamente los comentarios le llegan de rebote porque no se atreven a enfrentarse con él abiertamente en los ámbitos adecuados. nunca imaginó el perro que llegaría un punto en el que, en su no-vida, la gente tuviera pudor y reparos a la hora de enfrentarse con él. es cierto que sobresale dialécticamente, pero no le gusta el enfrentamiento abierto y eso se traslucía. sin embargo este año el perro cree que ha conseguido establecer una línea de respeto, que no se puede pisar al perro sin el riesgo de recibir una mordida al menos, y varias muy probablemente. y todo esto es gracias al Dueño y a su entrenamiento.
un entrenamiento que no sólo continúa, sino que además se profundiza. ayer el Dueño aprobó una serie de normas recientes que en vistas a que los cambios que comienzan el mes que viene en la no-vida del perro, también se reflejen en su vida. básicamente es apretar aún más el collar, reducir un poco la correa, cortar la posibilidad al perro de desviarse del camino. no hay grandes novedades, al contrario son cosas que el perro ya había empezado a vivir pero que ahora se radicalizan. copiando del email enviado al Dueño esas normas son:
-pasar de un macromanagement como hasta ahora a un micromanagement, donde el Dueño esté informado de lo que hace el perro en todo momento. además de la agenda el perro irá enviando mensajes que el Dueño no tendrá que contestar dejando constancia de cada cosa que hace en cada momento.
-el perro elaborará un libro con su credo, las normas y las leyes establecidas por el Dueño y lo primero que hará cada día será leerlo para recordar siempre lo que es y para qué vive. por la noche escribirá en el blog un apartado que será un "examen de conciencia" sobre lo que ha cumplido diligentemente y lo que no. el blog no será una mera constatación de lo ocurrido durante el día sino de como va la vida interior del esclavo. para eso necesita tiempo.
-este libro será la guía de vida del perro y todo lo que no esté allí explícito estará prohibido salvo que el Dueño de su consentimiento.
-no retrasarse en el blog más de tres días, siendo castigado de no cumplirse.
-hacer ejercicio como mínimo tres veces por semana, siendo castigado de no cumplirse.
-no tener más vida social, en el sentido de no quedar con amigos como cuestión de asueto salvo que sea con paco o previa súplica encarecida y argumentada. el perro ya no quedará con "amigos para tomar café" o con gente para comer porque despistan al perro de su auténtico sentido: vivir esclavizado. estas comidas hacen creer al perro que es un hombre libre y no es ni una cosa ni otra.
las normas fueron concedidas por el Dueño y, por tanto, incorporadas a su vida de esclavitud. desde el momento de su aprobación han pasado de ser súplicas a convertirse en leyes de obligado cumplimiento para el perro. dentro de quince días la vida del perro cambiará, y mucho, en todos los sentidos y será gracias al Dueño. y ante eso el perro sólo tiene palabras de agradecimiento.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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