atado boca abajo en el potro no podía moverse. cuando el Amo le introdujo el butt plug lo hizo sin consideración, pero sintió cierto placer. sin embargo empezó a oir el ruido del aire mientras lo inflaba y cómo crecía en su interior. en pocos segundos parecía que iba a explotar desde dentro y el placer se volvió dolor. aún con la mordaza gritó e intentó liberarse, sabiendo que era inútil y que eso sólo excitaría aún más al Amo. no tenía escapatoria. delante de él sólo había dolor y tendría que aceptarlo.
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