lo más chocante del bdsm es cuando los esclavos, que para el resto de la sociedad son varoniles y representan el modelo de masculinidad, son usados y humillados. socialmente son el centro, y todo guía alrededor de ellos, pero cuando son atados y amordazados, quedan en nada. su masculinidad sale por la ventada y se vuelven patéticos según los estándares que los consideraban machos.
muchos no lo aceptan y luchan, sin saber que su comportamiento hasta ese momento no es más que un papel, un teatro, y que realmente son seres inferiores, esclavos a disposición de los auténticos Amos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario