otro día sin tiempo para nada, casi sin poder respirar siquiera. hoy el perro echó de menos especialmente una buena sesión de momificación. se imaginó a sí mismo encerrado en un saco de cuero, tal y como ha prometido el Dueño, o envuelto en cintas y en plástico. inmediatamente el perro supo que le costaría soportar ese estado. la inmovilización radical que ambos producen requiere un estado mental que no es precisamente el que el perro tiene. hace falta mucha fuerza para mantener la calma suficiente. no somos conscientes de la velocidad a la que vamos hasta que no nos paramos. esa parada puede ser un frenazo si no se hace con cuidado y calma. eso no significa que no sea una necesidad. de hecho, en esos momentos el perro lo agradecería.
si se hicieran realidad sus deseos, y el perro estuviera hoy inmovilizado en un saco de cuero, o latex, o momificado; sin duda tendría que usar una gran cantidad de energía en calmarse y controlar su inercia de seguir haciendo cosas, de seguir tomando decisiones referentes a su no-vida, de hablar.....
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
jueves, 13 de marzo de 2014
día 1518 de esclavitud, 89 de castidad
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