jueves, 16 de enero de 2014

dia 1462 de esclavitud, 33 de castidad

el día pasó sin pena ni gloria, salvo cuando llegó la noche y el perro y el Dueño mantuvieron su conversación semanal. podría llamarse "tiempo muerto" o "tiempo de intensidad" o "confesión semanal". se trata de crear un entorno, un momento y un lugar para poder hablar "libremente", copartiendo cosas, suplicar permiso y aclaras malentendidos. ambos estábamos cansados y el Dueño planteó que fuera rápido. al final estuvimos cerca de hora y media. si alguien hubiera grabado la conversación seguramente habría quedado muy sorprendido. incluso el perro se sorprendió de algunas afirmaciones del Dueño, como "quiero controlar cada minuto de tu vida", o, "cada día vas bajando más por la escalera de la sumisión, hasta que llegues al final", y "ya estás más de la mitad del camino".
mirando con perspectiva el perro puede afirmar que el Dueño lo ha hecho más sumiso, pero el Dueño también afirma que tener perro lo ha radicalizado igualmente. lo que busca el perro no es políticamente correcto para casi nadie, pero es lo que el perro desea y busca desesperadamente. porque el dbsm tiene más que ver con el control que con el sexo, y el Dueño quiere controlar al perro radicalmente, hasta sus últimas consecuencias.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.

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