día 1404 de esclavitud

65 días de castidad, 9 desde el último ordeño.
ha ocurrido hoy una de esas situaciones en las que la jaula ha puesto en aprietos al perro. tenía ganas de orinar y en el trabajo sólo hay un retrete y tres urinarios pegados a la pared. por supuesto el perro siempre usa el retrete porque tiene que sentarse incluso para orinar. hoy estaba muy necesitado y fue corriendo al baño, con la mala suerte de que el retrete estaba ocupado. no podía espera por ganas, tiempo y oportunidad, y no tuvo más remedio que intentar hacerlo en el urinario. al final lo consiguió pero no sin temor de orinarse todos los pantalones porque, con la jaula, la orina sale por donde le parece. para hacerlo el perro tuvo que inclinarse completamente, hacia delante, curvando el cuerpo hacia atrás. menos mal que no había nadie más, salvo el compañero que estaba en el retrete que tenía controlado por los sonidos que emitía. si hubiera salido de pronto habría tenido que cambiar rápidamente de postura y disimular que seguía orinando. fue una situación muy estresante, sobre todo porque temía el perro orinarse en los pantalones. al final, haciendo balance, el perro consiguió salir airoso y no mojarse, pero sintió la humillación y la satisfacción de llevar la jaula permanentemente.
por la noche pasaron dos cosas sorprendentes, o al menos eso le pareció al perro. estuvo en contacto con dos esclavos. el primero es el tutorando que el Dueño ha permitido que oriente, a petición propia, que está comenzando en el camino del bdsm. vive lejos pero mantenemos contacto via internet. su petición inicial, hace apenas un mes, fue que lo introdujera en el mundo de la sumisión. sólo había tenido una sesión con un Amo y no había salido demasiado bien. la sorpresa surgió cuando, hablando con él, resulta que ha descubierto sus instintos dominantes. entonces ayer le planteé la posibilidad de que realmente fuera un Amo natural, más que un esclavo. la cuestión pareció sorprenderle, pero a la vez iluminarle. esto no es nada excepcional. cuando uno empieza es normal sentirse confuso, desorientado, sin tener las cosas claras. esto, como otras muchas cuestiones de la vida, se basa en el ensayo y error, en intentar una cosa y, si no sale, intentar otra y ver en cual te sientes más cómodo. ahora puede abordar esta nueva dimensión que no se había planteado. a medida que íbamos hablando y profundizando, resulta que más sentido adquiría eso de ser Amo. al perro le sorprendió una frase que dijo, que si fuera Amo quería serlo con filosofía, con profundidad, no puramente por sexo o morbo. tal frase en alguien tan joven, porque es muy joven, resulta sorprendente y gratificante. solo ha dado el primer paso de un camino muy largo, que tal vez le lleve toda la vida, pero todo viaje empieza de esa manera, dando un paso. la satisfacción del perro es que estamos necesitados de buenos Amos, de gente que oriente y adiestre a esclavos, y si este pequeña aportación puede ayudar a que esto sea así, bienvenido sea.
el otro giro inesperado ocurrió también ante una petición, cuando un hermano esclavo pidió al perro que le ayudara a resolver una situación personal. le tengo especial cariño a este hermano sumiso porque gracias a él, el perro tiene la jaula y ha entrado de esta forma en el mundo de la castidad, en obediencia al Dueño. cuando me planteó la cuestión, que no explica el perro aquí porque está bajo la consideración del Dueño, quedé sorprendido y sinceramente el perro no sabe si será posible. inmediatamente le comuniqué que tenía que elevar la petición al Dueño y que El decidiría, que no dependía de mi.
ha sido sin duda un día muy intenso.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.