día 1365 de esclavitud

26 días de castidad, 6 desde el último ordeño
ha sido un día agotador en el trabajo., muy cansino tener que bregar con tanto ego, con tanto egocéntrico. desde luego a menudo, demasiado a menudo últimamente, el perro piensa que muchas cosas funcionarán mejor con una dinámica D/s, establecida abiertamente. no nos engañemos, esa dinámica existe, pero se cubre ideológicamente con las ideas de igualda y libertad. un obrero que no puede expresarse libremente ante el patrón por el temor a sufrir represalias, no es realmente libre. solo vive el engaño de lo que es. hoy el perro ha vivido eso en el trabajo. varios compañeros hubieran merecido un castigo de sus Amos, si hubieran tenido, algo que sólo podía mejorar su nefasto modo de enfrentarse a determinadas situaciones.
por la tarde el perro estuvo en casa, encerrado, con la jaula especialmente presente.
además hoy el perro ha tenido unas ganas locas de correrse, de masturbarse. y lo hubiera hecho. en otra vida anterior hubiera pasado toda la tarde, nada más salir del trabajo, con la polla en la mano sacudiéndose, como un animal. pero el perro ya no es asi. al contrario, ha pasado toda la tarde semidesnudo con la jaula controlando su deseo y sus erecciones. una conversación con el Dueño por teléfono no hizo sino aumentar la incomodidad, por aumentar el deseo, y las ganas de sentir placer, de desahogarme. el perro sabe que ese tiempo ya pasó y, sobre todo, que no volverá más.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.