91 días de castidad, 91 desde el último ordeño.
el Dueño dice que no puedo fallar, ni puedo equivocarme, porque El tiene la responsabilidad y por tanto una decisión mal tomada no es responsabilidad del perro. el perro sólo falla en una cosa: en desobedecer. de igual forma los logros tampoco son logros del perro, sino del Dueño. si el perro consigue algo no lo consigue él, lo consigue el Dueño. si es alabado por su comportamiento en una reunión o si recibe un reconocimiento es el Dueño quien es el reconocido y el alabado. el intercambio de poder que caracteriza una relación bdsm de D/s no se que da sólo en mandar y obedecer, también se intercambian estos roles. esto viene porque hoy el perro ha recibido un reconocimiento en la universidad, e inmediatamente lo ha puesto en conocimiento del Dueño, se lo ha ofrecido como ofrenda y lo ha puesto, simbólicamente a sus pies. en el corazón del perro había un deseo profundo de que eso fuera así y de que el Dueño lo viviera de esa forma. y el Dueño así lo entendió, y el perro fue feliz.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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