17 días de castidad, 17 días desde el último ordeño.
a veces el perro se pregunta cómo ha llegado a esta situación. hoy ha estado gran parte del día trabajando en el blog, buscando material y fotos, desarrollando ideas y publicando las entradas que tenía pendientes. saldrán cuando el Dueño les de el visto bueno, pero tanta cosa ha hecho que el perro se ponga algo caliente. además ya pasa de la quincena el tiempo que el perro lleva en castidad. sin embargo lo curioso es que si ahora el Dueño le permitiera ordeñarse el perro no podría evitar preguntarse qué había hecho mal, qué cosa habría merecido tal castigo. en otros momentos, en otras situaciones, el perro lo habría deseado y disfrutado, ahora lo considera casi un castigo. supone que no es sino una prueba más de la fuerza y el poder del Dueño sobre su perro. así están las cosas actualmente sin poder hacer ni una cosa ni otra, sino lo que el Amo desee. esto es un hecho. ahora es el Amo el único que decide, el único que tiene poder y control sobre la sexualidad del perro. ya no hay marcha atrás.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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