el perro ha tenido un día intenso. el Amo ha estado muy presente, preguntando varias veces qué hacía su perro. en una ocasión incluso ordenó que el perro hiciera un examen de conciencia y el perro confesara cualquier falta que diera al ego posibilidad de intervenir. el resto del tiempo pasó entre el trabajo y la facultad, con las botas nuevas, sintiéndose el perro de nuevo él mismo.
obediencia ciega para el esclavo, poder absoluto para el Amo.
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