a veces lo más sencillo es lo mejor, una mordaza, unas muñequeras y unas botas; un simple colchón y ya podemos montar una sesión. es cierto que este perro es partidario del material, pero siempre que sea para usarlo adecuadamente. llega un punto en que da igual, da lo mismo lo que tengas puesto, siempre que los sentimientos estén ahí. mi Dueño me sedujo con sus botas y su pantalón de cuero. siempre recuerdo que en nuestro primer encuentro las puso delante mia como quien no quiere la cosa. fue un simple cruce de piernas que colocó delante mia sus brillantes botas y su pantalón. fue como lanzar el anzuelo, y piqué. sin embargo ahora nada más verlo, lleve lo que lleve, siento que mis piernas tiemblan y tengo que reprimir mis esfuerzos por tirarme a sus pies en la calle, delante de todo el mundo, agachar la cabeza para mostrar sumisión y esperar que, sencillamente, me la acaricie.
No hay comentarios:
Publicar un comentario