miércoles, 27 de abril de 2011

8 dias de castigo, 17 sin dordeñarse

hoy salí de mi casa a las siete de la mañana y regresé a las nueve de la noche. igual que ayer no hubo tiempo para muchas consideraciones: ni calenturas, ni tiempo siquiera para pensar, ni nada por el estilo. pensé que no sería así porque cuando me desperté tuve algunos pensamientos "perros". este esclavo se dice a sí mismo, y escribe en su blog, que se "siente muy perro cuando tiene un día especialmente sexual", y hoy parecía que iba a ser uno de esos días. al final no fue así, al menos durante el día, porque otra cosa fue cuando llegué a casa. me quité la ropa, fui al baño a orinar y entonces empiezo a supurar. me limpio pero aquello parecía no parar. tuve que limpiarme varias veces. no estaba en absoluto excitado, sencillamente mi cuerpo me estaba recordando que no podría escapar de él, que estaba allí y que aunque tuviera la mente ocupada, la situación que estaba viviendo desde hace más de dos semanas, se me iba a imponer quisiera o no. aunque intente evadirme, mi cuerpo se va a encargar de recordarme quien soy, qué estoy pasando, por qué estoy en esta situación. no lo expreso de forma negativa, porque todo esto tiene un único referente: mi AMO. en otras palabras, aunque mi mente no pueda tener presente a mi AMO por estar, necesariamente, focalizada en otras cosas, mi cuerpo se encargará de traerlo a mi realidad. por una cosa o por otra, no puedo escapar de El.

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