a pesar de lo que pueda parecer leyendo este blog, el camino de la esclavitud no es llano ni liso. a veces está lleno de curvas y de piedras en el camino que lo hacen más difícil de transitar. hoy es uno de esos días. las últimas tres semanas han sido tan intensas en cuanto a trabajo, reuniones y cosas pendientes que siento que el ego ha tomado espacio, ventaja, importancia. es algo hasta cierto punto normal, la vida no es algo lineal, pero empieza a preocupar cuando descentra del objetivo primario e importante, cuando te despista y no permite centrarte. este perro no pierde de vista a quién pertenece y a quien se somete, pero a veces el ego le hace imaginar que la libertad sigue ahí y que es algo bueno. esto es el espejismo de los esclavos, la fantasía de los sumisos, en el sentido más negativo del término. y es en este sentido porque produce en el alma del esclavo tristeza, alejamiento y pesimismo. la solución es relativamente fácil, y siempre la misma: volver a la fuente, arrodillarse ante su AMO y suplicarle que lo someta, que le ayude a matar al ego, a tenerlo controlado. esa es la tarea de este perro esta semana.
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