un esclavo no debe hablar, a menos que su AMO lo desee. hablar es expresar la voluntad, tener voz, decir algo. un esclavo debe tender a hablar cada vez menos y obedecer más. y un AMO tiene el derecho de hacer que esto se cumpla, bien sea por las buenas o por las malas, porque el esclavo no tiene derecho a quejarse.
mi AMO cada vez va apretando más la mordaza, cerrando cada vez más el collar, apretando cada vez más la cuerda, cerrando el círculo, para que no pueda salir de él, para que no desee salir de él, para que EL sea lo único.
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