viernes, 26 de junio de 2009

en el lugar más insospechado

a veces las cosas se encuentran en el lugar más insospechado. estaba esta mañana esperando a unos amigos en el rectorado de la universidad cuando me encuentro con un tio que trabajaba allí y que había salido a fumar. un rápido scaner e inmediatamente me fijé que tenía unas botas vaqueras, puntiagudas, marrones, de esas que son repujadas y son tan duras de lamer por las costuras. tuve que hacer un esfuerzo para dejar de mirarlas. mientras esperaba sentí alguna mirada furtiva, porque yo también llevaba botas pero tipo engineer aunque solo se vislumbraban a través del pantalón. el hecho de que hiciera tanto calor me hace pensar que a ambos nos guiaba y nos guia, una profunda devoción por las botas. mis amigos llegaron pronto y tuve que marcharme, no sin antes echarles un último vistazo a las botas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

eso mismo me pasa con las zapas. Hoy he visto aun bakala chandalero, de esos con chandal, gorrita nike tn, zapas air max, mazo curradas, petadas, kañeras. No podia kitarle ojo a las zapas. Me las comia con los ojos, y me hubiera tirado al suelo para lamerlas, besarlas, olerlas...