un nuevo día de viajes por cuestiones de trabajo. comenzó sobre las once de la mañana y terminó a las diez de la noche, más o menos. cuando llegó a casa el objeto, después del vuelo, le costó mucho dormirse, así que seguramente estará mañana muy agotado. lo mejor del día fue sin duda la conversación con mi Señor justo comiendo. el objeto no puede decir por qué ocurren estas cosas, por qué de pronto una conversación "normal" se convirte en una especie de sesión en la que mi Señor "folla", incluso a distancia, la mente de su objeto. tal vez no tenga que buscar razones. definitivamente no tiene que buscar razones. sencillamente ocurre y el objeto se somete, como somete toda su existencia a mi Señor. nada queda fuera de Su control, nada queda fuera de Su poder. hoy ha sabido cuándo despegaba, cuándo aterrizaba, cuándo tenía la formación, cuándo estaba de regreso. Él siempre sabe donde está su objeto, qué está haciendo, con quien está. casi podría decir que sabe lo que piensa y lo que siente su objeto. nada escapa a Su control. hoy lo ha sentido el objeto de nuevo. y solo puedes estar agradecido.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega
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