el día del regreso
es un día triste pero que comienza bien porque Dueño y objeto van a
desayunar al vips de colón. dos botudos muy arbigados porque hacía mucho
fin. los dos llevábamos las mismas botas, las lisas en el empeine pero
repujadas en la caña. el objeto seguía en silencio. el objeto temía que
eso pudiera importunar o molestar al Dueño pero en algún momento en que
el Dueño preguntó alo y esto no tenái el cuaderno para escribir, el
Dueño dijo "No digas nada. No lo estropees". Así que es algo que
agradaba al Dueño.
al llegar al vips el Dueño pidió lo que debía
desayunar el objeto porque esto no dijo nada, no podía decir nada. La
camarera era la tercera vez que nos atendía y el objeto no sabe si
supone algo o no. Desde luego ve la cadena al cuello del objeto porque
estoy ya no llevaba los grilletes. es lo último que la quinta del Dueño
al objeto antes de salir porque hace falta una llave especial y era
mucho problema quitarlos en la calle, no así la cadena.
por razones
familiares el Dueño ya no puede acompañar al objeto al aeropuerto así
qeu después de desayunar se producía la despedida. Es el momento más
duro de todo viaje.
el objeto tiene que ir hasta el aeropuerto solo,
en el metro y es algo que se deja un sabor extraño, haciendo un esfuerzo
por no ponerse triste. el Dueño ordenó que le fuera comunicando cada
paso qeu daba: cambiar una línea de traen, llegar al aeropuerto, pasar
el control de seguridad, etc. el objeto se tomó algo mienrtas esperaba,
leyendo. aprovechó mucho el tiempo, tanto en el aeropuerto como en el
viaje que fue algo movido por mal tiempo, pero que al objeto se le fue
rápido.
llegó a gran canaria a media tarde y apenas tuvo tiempo de
deshacer la mochila antes de ponerse de nuevo a trabajar para preparar
cosas para el trabajo mañana.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
domingo, 15 de enero de 2023
día 4749 de esclavitud, castrado permanentemente
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