existe un principio básico del comportamiento: si quieres comenzar un cambio en tu interior, cambia tu exterior y viceversa. curiosamente hay una relación entre lo que sentimos por dentro y lo que ocurre fuera de nosotros. si quieres estar más centrado, por ejemplo, recomiendan los psicólogos que ordenes o limpies tu habitación. ese cambio externo producirá un cambio interno, que es lo deseado. por supuesto no es algo matemático, pero sí que suele ocurrir en la mayoría de las ocasiones y que está en la base del bondage. cuando un Superior ata a su inferior, ese acto o hecho externo produce una reacción emocional y psicológica en el atado. en el caso del objeto el Dueño se da perfecta cuenta, porque en el momento en que el objeto se siente indefenso, realiza un pequeño suspiro, que indica que ha entrado en modo subspace. es inconsciente. el objeto no se lo propone, pero ocurre. por eso cuando el objeto ve bondages tan elaborados como el de hoy, que además constituyen posturas dolorosas o comprometidas, el objeto sabe que el ego de ese inferior se encuentra controlado y sometido por esas cuerdas que, aparentemente, solo constriñen el cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario