posiblemente haya formas más útiles, y tal vez efectivas, de limpiar unas botas. sin embargo lo que está en juego aquí no es si brillan o no, o si quedan suficientemente limpias. aquí lo que se está jugando es la posición de cada uno de los participantes dentro del esquema y la estructura del mundo. en el acto de lamer las botas de su Amo, el esclavo está reconociendo su Superioridad, y que él se encuentra por debajo. de esta forma está compensando la idea imperante en la sociedad de que todos somos iguales, hemos nacido iguales y tenemos los mismos derechos. lamiendo las botas restaura el equilibrio que se ha roto con esa idea. por su parte, haciendo lamer las botas, el Amo sitúa al objeto en su posición, de rodillas, sometido y entregado. de esta forma también se restaura el desequilibrio que marca toda relación de Dominación/sumisión, el sistema, las cosas vuelven a ser como deberían ser. no es un mero hecho de limpieza, sino de estructura y compensar una idea que está en la sociedad y que no tiene cabida en el bdsm.
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