no necesitamos vernos para tener una sesión. en muchos relatos que corren por internet el anonimato forma parte importante de las fantasías de muchos. ser usado por alguien que luego te deja y no sabes quien ha sido, ni le has visto la cara. dejar la puerta abierta mientras tienes una venda o estás atado a la cama y después de ser usado por el Amo que este salga sin saber siquiera el nombre. pero no es solo en la fantasía. como hemos visto en muchas entradas del blog, las capuchas son un elemento importante en las sesiones, en los encuentros. posiblemente no haya un colectivo que haya recibido con mayor interés el hecho de llevar mascarillas en la pasada pandemia que el mundo bdsm. las razones de esto pueden ser muchas. desde la vergüenza encubierta por tener prácticas no convencionales, a profundas necesidades de rechazar una identidad con la que no te sientes identificado y que tienes que mantener en tu vida cotidiana. el hecho es que las máscaras están, nos gustan y posiblemente no se vayan en un futuro cercano.
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