está pasando una
cosa curiosa. a medida que, físicamente, el objeto por fin va saliendo
de su estado de dolor y de malestar, primero con la espalda y luego con
el covid, se está produciendo un empeoramiento del aspecto psicológico.
el objeto lleva varios días muy triste y decaído, casi una semana, y
parece no recuperarse. por expresarlo con una imagen, se siente como un
cachorro herido que busca una esquina y se acurruca allí y desconfía de
todo el que se acerca, especialmente si lo hace de una forma rápida o no
demasiado calmada. es como si, una vez curado lo físico, las heridas
dejadas en lo psicológico por esta etapa, saliera a la luz. el objeto
sabe que el Dueño está ahí, que cuida y se preocupa del objeto, pero la
distancia no permite que la cosa vaya más rápido. han sido muchas cosas,
porque no es solo el dolor, que aún continua a veces, sino tener que
sobrellevarlo todo: la baja, el final del trimestre, y algún problema
familiar. luego vino en covid, que ha dejado muy cansado al objeto y del
que todavía no ha salido del todo. en definitiva muchas cosas y, cuando
el objeto se levanta por la mañana, no ve precisamente una mañana
luminosa, aunque no haya ni una nube y brille el sol.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
martes, 21 de junio de 2022
día 4540 de esclavitud, castrado permanentemente
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