domingo, 5 de junio de 2022

día 4524 de esclavitud, castrado permanentemente

el objeto tiene mañana una resonancia. se la han mandado para comprobar que el dolor que tiene en la espalda no es una hernia. ahora se le ha trasladado, desde hace algo más de una semana, a la pierna, así que no sabe si tiene el nervio ciático pinzado. el hecho es que ya lleva dos meses de dolores diarios. a veces lo lleva bien y a veces no tanto. en situaciones como esta el objeto puede distinguir perfectamente entre el dolor y el sufrimiento, una distinción que viene muy bien para el bdsm. porque se puede sentir dolor pero no estar sufriendo, y se puede no sentir dolor físico pero sí sufrir, y mucho. cuando un Amo tortura a un esclavo, bien sea por disciplina, castigo o sencillamente por gusto, no hay duda de que el inferior siente dolor. otra cosa es que sufra. de hecho la experiencia más común en estos casos es que justo se al contrario, que el inferior se sienta pleno, en una experiencia completamente cargada de sentido. esta distinción es importante, porque desde que el objeto pone su dolor bajo las botas del Dueño, este se hace más llevadero, incluso cuando no tenga relación con el bdsm, al menos aparentemente. y dice aparentemente porque cualquier circunstancia, incluso esta, puede convertirse en una oportunidad de entrenamiento, en una ocasión para perfeccionarse y mejorar, para adquirir nuevos hábitos y nuevas ideas sobre el servicio, la entrega y la sumisión.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.

No hay comentarios: