muy a su pesar el objeto ha tenido que poner bajo las botas del Dueño que su apéndice, debido al contacto con la jaula, tenía una rozadura que le estaba haciendo daño y lo puso bajo las botas del Dueño. el Dueño decidió que se la quitara hasta que estuviera curada. esto, por supuesto, no supone reducir un ápice su exigencia con respecto a la castidad y a vivir sometido. es cierto que la jaula es necesaria pero tampoco por sí misma evitaría que el objeto se masturbara. es el poder del Dueño, Sus deseos. obedeciendo el objeto se la quitó, e inmediatamente empezó a sentirse mal, como cuando estás desnudo delante de desconocidos. de hecho comenzó a gestarse un sentimiento de angustia que el objeto tuvo que integrar, que no reprimir, mediante el subspace. siguiendo las órdenes del Dueño, el objeto está entrenándose, o siendo entrenado más bien, para no sentir y no pensar, ser un mero objeto.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario