a veces hay
expresiones que dichas en un contexto determinado te dejan indiferente. y
sin embargo, si se dicen en otro contexto, en otro momento, arrasan
todo lo que encuentran a su paso. hoy el Dueño ha dicho una frase
sencilla. el objeto había puesto: "esto humildemente pone bajo sus botas
que no es nada, que no tiene derecho a nada. esto vale menos que
cualquiera de sus botas". a lo que el Dueño contestó "Más o menos dentro
de una semana lo vas a comprobar. Te voy a romper por todas partes". en
el mundo vanilla podría interpretarse como una amenaza. en el mundo
bdsm es un anuncio de salvación. el Dueño va a salvar al objeto de sí
mismo, de su ego, de su humanidad. el término romper, en nuestro
contexto no es algo negativo necesariamente. implica dolor, sin duda.
también cierto grado de violencia. pero sobre todo implica depurar aún
más al objeto, centrarlo en aquello para lo que el Dueño lo ha ido
modelando, vivir su auténtica naturaleza. "romper" es sinónimo de
oportunidad, de posibilidad, de autenticidad. es sinónimo de renacer, de
depurar, de pulir, de poner a punto. no todos los Amos tienen el valor
de romper a sus esclavos. en el fondo es una operación peligrosa, porque
igual que hace el traumatólogo, que rompe para colocar en su sitio, la
operación posterior no está a disposición de muchos. en el bdsm romper
es un acto de creación, de modelar al inferior a imagen y a gusto del
Superior. se rompe la voluntad, se rompe la libertad, se rompe la
autonomía, se rompe el pensamiento. es como quien derriba para dejar
sitio al solar sobre el que se construirá un edificio nuevo, más lujoso,
más modernos, más elegante, más funcional y más útil, en definitiva un
edificio mejor.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
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