mirando hacia atrás el objeto se da cuenta de lo que ha cambiado, de lo mucho que ha trabajado el Dueño para transformarlo en lo que es actualmente. el cambio ha sido tan radical que el objeto siente que hay una fractura, por eso dice a menudo que el Dueño le ha creado, porque ya no reconoce como suyo nada de la vida antes de conocer al Dueño. antes jamás habría pensado que viendo esta imagen se le vendría a la mente la idea de hogar, de lugar donde vivir de manera permanente, de sensación de seguridad. pero es así. en estos momentos de su existencia estar así como está ese sumiso sería toda una bendición. de hecho si en la celda pudiera haber una cama y una mesa, y tal vez un retrete en un extremo, suplicaría al Dueño que lo encerrara y lo dejara ahí tiempo indefinido. no importan las cadenas, no importa el peso, no importa el aislamiento o la soledad. precisamente eso es lo que el objeto añora y desea.
No hay comentarios:
Publicar un comentario