domingo, 19 de diciembre de 2021

día 4356 de esclavitud, castrado permanentemente

todavía está el objeto rumiando la conversación de ayer del Dueño, y dice rumiando porque es justamente eso. vuelve una y otra vez, se centra en una frase, luego viene otra, luego desaparece y aparece una expresión y el objeto no puede quitarse de encima nada de eso. siente como poco a poco va perforando su mente, cambiando sus ideas, modificándolas, haciéndolas madurar. el Dueño no está presente, no tiene atado al objeto, pero su tarea sigue imparable y el objeto casi puede sentir como va cambiando sin poder impedirlo. es el poder del Dueño que sigue el entrenamiento, que sigue esclavizando al objeto, haciendo las cadenas más fuertes, haciéndolo más dependiente. esto no puede quejarse ni plantear una reclamación porque fue lo que deseó y lo que suplicó al Dueño, y sigue haciéndolo, o seguiría si pudiera porque cada segundo que pasa el objeto se siente que controla menos de su existencia. es casi como estar borracho, un estado alterado de conciencia que hace que el objeto no se sienta humano, mejor dicho, confirme que no es humano y que la única forma de encontrar la paz y la tranquilidad es bajo las botas del Dueño, obedeciendo ciegamente, sometiéndose profundamente.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega

No hay comentarios: