mostrar en público la sumisión y la obediencia de un inferior hacia un Superior es una experiencia muy intensa, porque va en contra de todo lo aprendido e interiorizado desde la primera socialización. por eso hacerlo es mostrar el entrenamiento al que has sido sometido por el Amo, demostrar que ha conseguido borrar esas ideas, esos principios y enseñar a todos que a partir de ahora te manejan con otros criterios. en el fondo es un acto psicológico de muerte, pero también de renacer. al hacerlo en público tanto el Amo como el sumiso se someten al juicio de los demás, y son los otros los que juzgan. eso es matador para el ego. el ego siempre quiere ponerse por encima, destacar, prevalecer, imponerse.... en un acto público de humillación el ego es lo último y por eso es una victoria de la sumisión.
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