al principio de toda relación bdsm debe ocupar un lugar importante la negociación, el hecho de poner sobre la mesa aquello que Superior e inferior están dispuestos a hacer y qué no. esto es la base del consentimiento, que en el fondo es lo que separa una relación de Dominación/sumisión de una relación de abuso. en la primera ambas partes están de acuerdo en lo que están haciendo mientras que en la segunda uno se impone sobre el otro. sin embargo a medida que la relación avanza, la confianza aumenta, se profundiza en la sumisión y el inferior sabe que puede confiar plenamente en el Superior, la necesidad de negociar disminuye. un buen Amo va guiando al inferior hasta lugares y prácticas que nunca creyó poder realizar. a eso se le llama crecimiento y en una relación D/s ambos creen, uno en Dominación y otro en sumisión. las posibilidades son casi infinitas, las formas de humillar, de someter, de llevar al inferior al extremo y ver cómo lo cruza y luego agradece humildemente a su Superior que le haya llevado hasta allí.
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