el objeto se alimenta del Dueño. vive de su control y de la Dominación que ejerce sobre el objeto. hace ya demasiado que el objeto no está físicamente bajo las botas del Dueño. la pandemia ha impedido que el objeto pueda viajar a madrid, donde vive el Dueño. pero paradójicamente eso no significa que la sumisión hay descendido, al contrario. pareciera que ha ido en aumento. cada día que pasa el objeto tiene que enfrentarse a simular ser humano, pero a la vez la sumisión se hace más profunda. la jaula sigue en su sitio, las botas ayudan al objeto a vivir teniendo en mente a Dueño y cuando el Dueño manda un mensaje las piernas del objeto tiemblan. ante los que afirman que no se puede mantener una relación a distancia esto sólo puede decirles que siente el control del Dueño sobre su vida. es verdad que ahora también siente que no poder servirle físicamente, no sentir en la lengua del objeto las botas del Dueño, puede ser una de las razones por las que esta semana el objeto se ha sentido tan mal. sin embargo no podemos elegir determinadas cosas, como vivir en medio de una pandemia que nadie imaginaba hace un año, pero es así. la seguridad y la salud se han convertido en una prioridad. el objeto esperará y esperará porque tampoco puede hacer otra cosa ya que el Dueño ha encadenado su mente de una manera que hace que el objeto no pueda escapar.
sumisión en silencio, castidad y obediencia ciega.
No hay comentarios:
Publicar un comentario